jueves, 31 de enero de 2013

INVERNAL

Frío...demasiado frío...el pensamiento se enlentece y tus respuestas se hacen más pesadas, más torpes..."demasiado frío..." te repites una y otra vez.. pero estás cerca. La luz y el frío parece que forman su "mantra" ancestral para penetrar en tu mente sin que llegues a darte cuanta a tiempo...demasiado frío... Otra ráfaga de viento más fuerte te saca del letargo, el mantra se hace "ruido", te desordena, pero tus pies siguen ahí...aferrados al hielo, que se queja cuando descargas tu peso...Otra ráfaga, otro golpe de viento gélido que te hace recordar dónde estás, qué eres... Entonces pides permiso a la montaña, prometes llegar hasta donde ella te deje...ni un paso más... En la cumbre se lo agradeces, dejas que la luz te inunde...el frío es menor aquí arriba (absurdo), te deja "vivir" un momento...Cumbre fría, muy fría...Hay que bajar. 

1 comentario:

  1. Gracias, Saúl, por ser tan buen compañero de viajes en la gélida ventisca.

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